-¿Qué tal la vida de casado? -Genial. -¿Qué te pasa en el ojo? -Un tic. -Antes no lo tenías.. -ESTOY MUY FELIZ, ¿¡VALE!?
—Quien tenga algo que decir que hable ahora o calle para siempre. —Eso ya lo he dicho yo, usted diga «sí, quiero». —¡Decid algo, cabrones!