Celador
—¿Y dónde dice que estudió medicina?
—En ningún sitio, soy celador
—¿Entonces lo de antes no era una exploración?
—No
—Ha sido…
—Sí
—De ahí los jadeos y…
—Los mordiscos en la nuca
—Vaya
—Tendrá que pedir otra cita
—Te doy mi whatsapp
—Digo para la prueba
—Ah, sí. Buenos días.